Ayer en la oficina dental, mientras que yo estaba siendo inyectado con la anestesia en mi dentadura, por un momento muy breve sentí fuertemente el pinchazo de la aguja. Casi al instante al también sentí que la asistente dental acariciaba mi hombro. En ese momento deje de notar el pinchazo de la aguja, de hecho yo casi no sentía nada.
En ese momento tuve esta epifanía: Está en mi naturaleza no sólo notar, sino pensar insistentemente el dolor que estoy sintiendo en este momento. Es como si el dolo me gritara en la cara y es casi imposible de ignorar. Es tan real. Es este nuevo conocimiento el que ha hecho darme cuenta del lugar y el poder que la adoración, la oración y la memorización de la Biblia tienen en mi vida.
Me acordé de cómo Pablo y Silas estaban cantando en la cárcel después de ser golpeados y azotados. Hechos 16:16-40 ¿por qué cantan los salmos? Porque cantar en absoluto?! No es que se trataba de un mecanismo de supervivencia, pero el hecho es que cuando uno está experimentando el dolor se tiene dos opciones: Medita en el dolor o pensar en algo diferente, que sea de consolacion … Me pregunto si yo hubiera estado allí con ellos, me han sugerido a pensar de Dios en la adoración?